¿Qué son los TCA?
Los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA), son unos de los trastornos mentales más comunes en las últimas décadas y uno de los que más amenazan la vida de las personas, con una tasa de mortalidad elevada.
Los transtornos de la
conducta
alimentaria…
se caracterizan por manifestar conductas alteradas asociados a la ingesta alimentaria y la actividad física, con comportamientos de control de peso. trastornos alimentarios, conductas y pensamientos peligrosos de control de peso que comportan problemas físicos y psicosociales.
Tienen un componente emocional importante y pueden ser usadas para afrontar emociones y situaciones difíciles.
Los TCA pueden afectar cualquier persona, independientemente de género, edad, etnicidad o situación social y es común viajar de un diagnóstico al otro. Los diagnósticos clínicos de los TCA se clasifican como anorexia nerviosa, bulimia nerviosa, trastorno por atracón, otro trastorno alimentario o de la ingestión de alimentos especificado, trastorno alimentario o de la ingestión de alimentos no especificado, pica, trastorno de rumiación y el trastorno de evitación/restricción de la ingesta de alimentos. Un diagnóstico correcto es clave y nos permite entender el problema para poder solucionarlo.
Es importante recordar que los TCA no tienen que ver solo con la comida en sí, sino con los sentimientos. La forma en que la persona trata los alimentos puede hacer que se sienta más capaz de sobrellevar la situación, o puede hacer que se sienta en una posición de control o de pérdida del mismo, siendo posible que no sea consciente del propósito de este comportamiento. Un TCA nunca es culpa de la persona que lo padece, y cualquier persona que tenga un trastorno alimenticio merece un apoyo rápido y compasivo para ayudarlo a mejorar.
Señales de alarma.
Físicas.
Existen una serie de características que, aunque no tienen porqué darse en todas las personas y diagnósticos por igual, has podido experimentar en los últimos tiempos. Es posible que hayas podido percibir cambios de peso de manera brusca, llevándote a un índice de masa corporal (IMC) o peso corporal inusualmente bajo o alto; lo cual incluso ha podido generar fallos en el crecimiento normal para tu peso y edad correspondiente. Además, si has experimentado dichas sensaciones, habrás podido percibir fallos en tu menstruación.
¿En algún momento has sospechado que tienes mala circulación o cambios en la temperatura corporal? ¿Sientes tus manos y pies más fríos de lo habitual? ¿Tienes sudores fríos? ¿Síntomas gastrointestinales inexplicables incluso por una condición médica, estreñimiento, piel seca o pérdida de pelo?
También, es frecuente una sensación de mareos y palpitaciones, así como una sensación continua de debilidad y cansancio.
Cognitivas y emocionales.
Es muy frecuente que, en los últimos tiempos, hayas notado que la comida se ha convertido en tu principal foco de atención, siendo el pensamiento más recurrente a lo largo del día, del que por más que lo intentas, te cuesta desprenderte.
Puede aparecer una constante inestabilidad emocional que afecta a la propia relación contigo misma/o, generando una distorsión de tu propio cuerpo y los pensamientos sobre ti misma/o.
Es posible también que cambie la relación que mantienes con tu entorno, por ejemplo mostrándote más irascible en casa, problemas de pareja, o sin ganas de salir mucho con amigos.
La ansiedad dirige todo y te sientes más irritable y triste, dejando que los sentimientos de culpabilidad aparezcan de manera más notable últimamente.
¿Sientes miedo exagerado a engordar aún sabiendo que últimamente has bajado peso o tienes miedo a no poder obtener o mantener un normopeso?
¿Sientes frustración o angustia (una bola en el estómago, un vacío constante, un nudo en la garganta) tan potente que psicosomáticamente lo notas en tu sistema digestivo?
En resumen, ¿tienes la percepción de no tener el control sobre tu cuerpo y/o comida?
Si consideras que esto te ha sucedido, o te está sucediendo, es normal sentir que tu autoestima haya disminuido, por ello es importante que acudas a un especialista.
Conductuales.
Lo primero que habrás notado es que algo en tu vida ha cambiado, no sólo con la comida, también con los demás y contigo misma/o. A veces los demás notan que tu relación con la comida ha cambiado antes de que te des cuenta. Puede que en los últimos tiempos hayas notado que tu relación con la comida afecta directamente cada aspecto de tu vida.
¿Sientes que la comida te controla o por el contrario intentas tú controlar la comida?
¿Tienes normas muy estrictas sobre tu nutrición y actividad física o vives en un caos?
¿Gastas mucho dinero en comida? ¿Te miras mucho al espejo o los evitas? ¿Controlas tu peso habitualmente o evitas hacerlo?
¿Crees que siempre vuelves a caer en los mismos errores y sientes culpabilidad por ello?
¿Hagas lo que hagas, siempre te sientes culpable?
La recuperación total de un TCA es posible con la ayuda y el apoyo adecuado.
¿Crees que tu cuerpo te identifica?
¿En los últimos meses piensas más en la comida?
¿Has creado normas en tu régimen de alimentación y ejercicio o bien sientes lo contrario y crees que has perdido el control?
¿Sientes culpabilidad para con mi relación cuerpo-comida?
¿ Cuál es el siguiente paso ?
Si tienes un TCA, el primer paso es buscar ayuda externa para recibir un tratamiento.
La responsabilidad clínica debe ser asumida por un profesional acreditado.
Visita las páginas https://www.acab.org/es/ y https://www.beateatingdisorders.org.uk/, son nuestras favoritas.